MiltoN

Mis sombras... tus sombraS


Como si no quisiera recordar, me dediqué a revisar imágenes perdidas en mi computador, mirando fotos, que en algún momento guardé y que ahí quedaron perdidas, llenándose de un polvo cyberespacial... Quién iba pensar que de esa búsqueda encontraría esta foto... Quién imaginaría, que de unos minutos sin querer pensar, resultaría el momento mas preciado de recordar de dónde fue esa foto, de cómo fué, y cómo llegó a mis manos.-

"Eran como las 2:30 de la mañana, luego de haber compartido la tarde con algunos amigos en un Pub, haber tomado bastante, haber reído, llorado, disfrutado todas esas horas encerrados en alcoholes, cigarros, secretos, y romanticismo... Afuera llovía como nunca... y nuestras ropas estaban mojadas, y el frio se colaba junto a la humedad de la lluvia en nuestras chaquetas...

Estuvimos todos juntos algunas horas bastante plenas... Y ahí fue que nos quicimos quedar solos, y esperamos que se fueran los amigos, y nos quedamos, para los dos... Te invité una cerveza, la aceptaste sonriente... era nuestro momento, el único momento luego de tanto tiempo de conocernos... era el momento que estabamos los dos compartiendo las sonrisas... y ahí bebimos, nos secreteamos cosas, compartimos los cigarros a medias porque quedaban pocos, y ninguno de los dos quería moverse de esa mesa... ninguno se queria separar de ese minutos estelar.-

Habremos estado unas dos horas entre la conversa, el ruido de la calle, la noche intermitente que se vio llegar callada a nuestos espacios... Estuvimos hasta que cerró el local, y de el salimos sin rumbo alguno, miramos los relojes, y vimos claramente que ya era medianoche... estuvimos sin darnos cuenta, hasta esa hora, en las calles santiaguinas sin destino, con mucho que compartir... -"no me quiero ir todavia", fueron las palabras que te escuché decir, luego de unos segundos de silencio mutuo, pensando a dónde ibamos... Asi que tomé tu mano, la apreté en la mia, y caminamos a algún otro lugar que no cerrara tan temprano. No caminamos mucho, y me miraste, y cuando nuestros ojos impactaron en la mirada, me dijiste -"vamos a mi departamento?¿". Me quede mudo, en mi cabeza solo quería decirte que si, pero me daba verguenza... -"Ya po, responde", insististe. "Vamos", fue lo único que podía decirte, si sabias que queria estar contigo, para qué me preguntabas. Así que nos pusimos en camino a tu depto, que no estaba a tantas cuadras de donde estabamos. Y mientras caminabamos, hablamos de recuerdos, de cómo nos conocimos, lo primero que te dije, que me dijiste... Y reíamos de tanta tontera que uno hace sin darse cuenta.-

Cuando entramos a tu piso, una cálida ventolera salió a recibirnos, como si ahí, ese espacio no supiera de fríos. Me ofreciste vino, y algunas empanadas de queso que te habian quedado de no se qué. Y nos quedamos otras horas en tu mesa de centro, comiendo bebiendo y hablando más y más... ahí sacamos los amores que cada uno habia tenido... ahí fue que sacamos lo que sentiamos uno del otro... sin darnos cuenta, los dos sentiamos algo... Nos quedamos callados en una, y en el ambiente sólo sonaba el disco de Silvio que habiamos compartido en otros momentos, sonaba "en el claro de la luna", ahi en esa noche fria, que empañaba las ventanas, bajo esa luz tenue de las velas y la música sonando a nuestras espaldas... te tomé la mano, comencé a acariciarla, como si fuera la última vez que nos vieramos, como si fuera profeta de lo que pasaría a las siguientes semanas... me acerqué a tu rostro, y suavemente besé tu mejilla, besé la otra, y ahi nuestros labios se reventaron en un beso suave y dudoso, y despues en uno que se desenfrenó en varios mas... No recuerdo cuánto rato estuvimos en eso, pero si recuerdos que luego te veia desnuda en la alfombra, y te recorría con las palmas de las manos como tu me recorrías con las tuyas... Pasamos en eso tanto rato, tanto rato, que luego escuché que el disco de Silvio se habia agotado, y ahora sonaba Milton Nascimento, mi disco, el que había puesto para que oyeras... y ahi estabamos oyendonos a nosotros mismos, con la melodía brasileña.

Terminamos en tu cama, arropados de las sábanas, y en el ventanal se veían pasar los autos madrugadores, ahí tomaste tu cámara, comenzaste a disfrutar de los flashs, disparando a todos lados, a todas nuestras partes... a todo rincón. Ahi fue cuando me dijiste que te irías a Valparaíso, que volverías en tres años mas... "tres años mas?¿", me dije a mi mismo y luego se lo dije a ella... "me esperaras?¿", me preguntaste con todo entusiasmo... Pensé un minuto en ello, pero claro estaba que ya tenía la respuesta desde que me dijjiste que no volverias hasta pasado tres años... "Lo siento, pero no puede esperar, sabiendo que no me esperarás"... No pude asegurarte nada, porque darte la esperanza era engañarme a mi mismo, porque te podria haber dicho que si, pero no sabia lo que se vendria mas a delante...

No nos vemos desde ese momento, y sólo quedaron las imágenes... sé que llegarás alguno de estos dias, y ahora pienso que tenía razón, porque si te hubiera dicho que si, te hubiera mentido, porque luego de ese día, conocí a un número de personas, de la cual, una me dejó muy aferrado, me tiene muy aferrado... Te hubiera mentido en ese momento... No sabemos de la vida ni de nosotros mismos, hasta que sentimos algo que nos dice lo que debemos hacer...